El parque Aguirre es quizás uno de los lugares más luminosos de la ciudad. De este lado de la costanera es mucho más chico que de cerca del río, pero también tiene su encanto. El circuito que hicieron caminadores y corredores de todas las horas y que va de la Alsina a la escuela Industrial, tiene más o menos tres kilómetros. Quienes van todos los días por allí sostienen que en una hora caben perfectamente tres vueltas, suficiente para oxigenar el cuerpo y limpiar el alma. En este tiempo, además, el grito de las catitas, las santarritas y el reverdecer de muchas plantas, hacen que también sea una fiesta para los ojos. Muchos visitantes también sostienen que allí hallaron una paz que no hay en sus lugares de origen.
En esta galería de fotos, una muestra del parque Aguirre. Pero lleve usted su cámara y tome sus propias fotografías, que seguramente han de mostrar lo que más le gusta de uno de los sitios más emblemáticos de los santiagueños.
Para ver más fotografías: http://www.santiagotur.com/index.php/el-parque-aguirre