Ojo de Agua, cerca del ingreso provincial por la Ruta 9, será sede del parque eólico El Jume, el primero de su clase en Santiago del Estero. La iniciativa, tasada en 20 millones de dólares, fue calificada como una de las “más importantes obras en ejecución” por el gobernador Gerardo Zamora. “Representa un gran orgullo para todos los santiagueños”, remarcó el mandatario.
El parque, que hoy se encuentra en su última etapa de construcción, tendrá una capacidad instalada de 8,4 megawatts (Mw) y aportará a la red eléctrica unos 30.000 megawatts por hora al año, por lo que abastecerá a unos 15.000 hogares en el sur santiagueño, Ojo de Agua, Sol de Julio y Sumampa. “Si bien no se trata de una gran cantidad de energía, nos permitirá amortizar la obra rápidamente. Y más allá de eso, este emprendimiento implica un verdadero salto cualitativo para la provincia en materia de generación de energías limpias”, aseguró Zamora.
El proyecto es dirigido por Energía Santiago del Estero y ejecutado por Industrias Metalúrgicas Pescarmona, que también se ocupará de su operación y mantenimiento. Según informaron técnicos de la firma mendocina, ya se han construido los caminos internos, el portal de ingreso, el obrador y las plataformas de montaje, y se ha completado exitosamente el hormigonado de la base de las torres de 85 metros de altura que producirán energía, las cuales están siendo colocadas por estos días. “Luego de ello, sólo habrá que instalar los aerogeneradores antes de empezar formalmente a generar electricidad”, puntualizaron a este medio.
Energía de Santiago del Estero es una sociedad integrada por capitales públicos y privados, con mayoría accionaria estatal (65 por ciento). Presidida por Horacio Montenegro, fue constituida en el 2008 para optimizar el aprovechamiento y la explotación de los recursos energéticos de Santiago.
Industrias Metalúrgicas Pescarmona, en tanto, es el mayor generador de energía eólica en Latinoamérica y la única empresa en la región que cuenta con dos centros de producción de aerogeneradores en distintos países, Brasil y la Argentina, con una capacidad de fabricación total de hasta 1.000 megawts.
El parque eólico estará constituido por cuatro aerogeneradores modelo IWP-100, de 2,1 Mw de potencia nominal cada uno. Encargados de transformar la energía del viento en electricidad, estarán distribuidos sobre una superficie de aproximadamente 80 hectáreas.
Estos equipos serán de eje horizontal (su eje de rotación se hallará paralelo al piso), tecnología sumamente eficaz para adaptarse a vientos de distintas intensidades. Estarán montados sobre torres de acero tubular, cada una de ellas constituida por cuatro tramos, hasta alcanzar una altura de 85 metros, equivalente a un edificio de 30 pisos.
El generador eléctrico poseerá un rotor compuesto por tres palas de 49 metros que le conferirán un diámetro de aproximadamente 100 metros. Sin caja multiplicadora, será de tipo síncrono múltiplo y poseerá imanes permanentes, velocidad de rotación variable y convertidor de frecuencia.
Una de las innovadoras particularidades del complejo es que contará con el Centro de Interpretación El Jume, un edificio anexo que apunta a jerarquizar aún más la iniciativa. Su construcción demandará el desembolso de más de $ 7 millones.
Dispondrá de recursos expositivos e interpretativos clásicos y albergará visitas guiadas, recorridos señalizados y distintas actividades de sensibilización ambiental. Algunos de sus objetivos básicos son crear conciencia sobre la importancia de la energía eólica, suscitar experiencias atractivas para los visitantes y promover el turismo en la zona, entre otros.