Un siglo después de su creación, el teatro 25 de Mayo vivirá su momento de máximo esplendor, con la recuperación total de todos sus espacios que darán cabida a distintas expresiones artísticas, como también de lugares apropiados para el funcionamiento de oficinas y talleres que por mucho tiempo permanecieron en lugares recónditos del inmueble.
Con vistas a rediseñar un trabajo de recuperación integral, entre noviembre y diciembre del año pasado, un equipo técnico recorrió las amplias instalaciones para constatar el estado de los distintos sectores del edificio y proyectar las distintas obras de refacción que se harán en el teatro 25 de Mayo.
En el 2012, el teatro comenzó a recuperar lentamente algunos de los espacios del edificio, a partir de la construcción de la nueva Legislatura provincial, pronta a inaugurarse sobre la calle Roca. Por ello se espera recuperar espacios que por su gran jerarquía arquitectónica italiana con decoración española, merece un delicado trabajo de restauración para la conservación integral del edificio.
El que fuera salón de sesiones de la Legislatura provincial, se convertirá en el recinto principal del teatro: un salón palaciego que se asemejará al salón dorado del teatro Colón y otros recintos de importantes coliseos del mundo.
El salón más importante está en buen estado y estará en funcionamiento en poco tiempo, adelantaron desde la dirección del teatro.
En ese espacio, se prevé recuperar y restaurar el piso de madera original, que está debajo de la tarima en que funcionó la sala de sesiones de la Legislatura provincial.
De esta forma, lo netamente artístico, se trasladará a la planta alta del coliseo, recuperándose lo que fuera la Cámara de Diputados, con sillas especiales para puestas no convencionales, con un moderno salón que se asemejará a los grandes salones de los palacios europeos, como una manera de recuperar su esplendor histórico.
El salón palaciego será un espacio de usos múltiples, con la realización de conferencias, agasajos, presentaciones de libros, encuentros culturales, entre otras actividades pensadas para reducida capacidad de público.
Este invaluable patrimonio arquitectónico en pleno centro de la capital, acrecentará su espacio para convertirse en un lugar con sitios más confortables para el personal de la dirección del coliseo, con un edificio que brindará amplias comodidades al ocasional público que asista a sus funciones.