La mayor parte de la provincia de Santiago del Estero posee clima semitropical continental con estación seca, que se caracteriza por tener temperaturas bastante extremas y precipitaciones de abundantes a suficientes concentradas en verano.
Una característica peculiar del clima es la presencia de algunos días con temperaturas anormales para la estación, por ejemplo máximas de 40 grados centígrados en pleno invierno, o temperaturas que no pasan de 30 grados en el verano.
También puede decirse que la provincia es de extremos, con marcas cercanas a los 50 grados en el norte y 3 grados bajo cero en el sur.
Además debido a la lejanía del mar se acentúa la continentalidad, lo que resulta en baja humedad ambiental y diferencias entre el día y la noche que pueden superar fácilmente los 20 grados.
La provincia se ve afectada regularmente por sequías, ya que en general las precipitaciones son escasas y prácticamente limitadas solo al verano.